Por Muy Interesante 
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No apareció hasta el siglo IV y la fecha fue impuesta por intereses políticos y religiosos.
Un árbol con luces y adornos, una recreación en miniatura del portal de Belén, villancicos y mucha, mucha comida. Estos son los principales elementos que forman parte de la tradición cristiana a la hora de celebrar la Navidad. Pero, como cabría esperar, esto no es más que la manifestación actual de un proceso histórico que ha tenido muchos cambios a lo largo de siglos.
En “Muy Interesante” ya nos hemos preguntado por el origen del árbol de Navidad, por la comida de Navidad más cara de la historia o el origen pagano de esta fiesta. Pero esta vez queremos irnos al inicio de todo, de la propia celebración cristiana. ¿Cuándo nació la Navidad? ¿Desde cuándo existe la Navidad según nuestro concepto actual?
Cuando no existía la Navidad
Como toda tradición, se forjó a lo largo de un proceso histórico que contó con varios hitos destacados. De entrada, hay que dejar claro que los evangelios no mencionan la Navidad ni nada parecido a lo que hacemos hoy. Ni siquiera hay mucha información sobre el nacimiento de Jesús, por lo que todo parece indicar que los primeros cristianos no celebraban la Navidad. De hecho, es curioso que esta festividad religiosa haya ganado tanta popularidad, pues el cristianismo es más propenso a colocar sus fechas destacadas en torno a las muertes de sus santos, no a los nacimientos y, sobre todo, a la de Jesucristo, por ello la Semana Santa es el eje de esta religión, que dedica sus días más importantes del año a la pasión, muerte y resurrección de Cristo.
Otro asunto curioso es la fecha en la que celebramos la Navidad. No sabemos realmente cuándo nació Jesús. Los evangelios, la fuente principal para documentar histórica y religiosamente la vida y hechos de Jesús, no especifican la fecha de nacimiento del Mesías. Y, por supuesto, mucho menos la arqueología, pues resulta imposible rastrear materialmente el nacimiento de un niño “cualquiera” en un pesebre hace más de 2000 años. Diversos teólogos y estudiosos en general han situado el nacimiento de Jesús en días diferentes a lo largo de la historia.
Se ha hablado del 29 de marzo, el 20 de mayo, el 6 de enero y otros han defendido que fue en junio. ¿De dónde sale el 25 de diciembre como fecha del nacimiento de Jesús?
La adaptación del cristianismo
La investigadora Estrella Rodríguez Gallar es autora de un capítulo en el libro “La Natividad: arte, religiosidad y tradiciones populares” en el que repasa el origen de muchos de los aspectos que hoy forman parte de nuestras fiestas a finales de cada año y señala que:
“Las fiestas de Navidad son las más populares de todo el calendario cristiano, sin embargo no fueron tal y como las conocemos hoy en día, pues hunden sus raíces en tradiciones milenarias, y aunque celebran un hecho concreto, el nacimiento de Jesús en Belén, muchas de sus manifestaciones han sufrido con el paso del tiempo un proceso de simbiosis con tradiciones paganas y de compleja elaboración tanto en lo teológico como en su expresión pública y popular”.
Hay dos teorías acerca de cómo se acabó celebrando la Navidad el 25 de diciembre. Una es a partir de cálculos realizados en base a ciertas conjeturas, como que la encarnación de Jesús, es decir, su concepción por el Espíritu Santo y la Virgen María sucedió el 25 de marzo. Con esas matemáticas exactas propias de las creencias, Jesús nacería nueve meses después, es decir, el 25 de diciembre.
La otra teoría, quizás con más alcance histórico, argumenta que la fecha de la Navidad se debe a la influencia de celebraciones paganas que existían antes que el cristianismo. Esas raíces que menciona Estrella Rodríguez tienen, sobre todo, dos festividades romanas como base fundamental: las Saturnales y la fiesta del Sol Invictus.
“El nacimiento de Jesús es un hecho histórico indiscutible, del que a ciencia cierta tenemos pocos conocimientos. Sin embargo, nos consta que la Iglesia eligió estratégicamente una serie de fechas para celebrar las fiestas navideñas, consciente de la importancia que ya revestían los citados días para la religión pagana, por lo que resultaría mucho más sencillo cristianizar estas festividades milenarias, que hacerlas olvidar radicalmente y sustituirlas por otras”.
Es decir, la Iglesia es especialista en adaptarse, clave de la difusión del cristianismo y de la resistencia de la institución por más que pasen los años, cambien las mentalidades y los contextos. La Navidad nació como sustitución de ritos paganos para asentar de manera más efectiva los ritos cristianos. La misma táctica fue exportada a todos los lugares del mundo en diferentes momentos de la historia desde el Imperio romano al Descubrimiento de América y su posterior evangelización.
La primera Navidad
Por tanto, es posible afirmar que la Navidad se estableció por el poder del momento con una intención política y religiosa (que en la Antigüedad iban tan unidas que prácticamente eran lo mismo). Entonces, ¿cuándo fue la primera Navidad?
El origen de la Navidad se remonta al siglo IV d. C. Constantino el Grande fue el primer emperador en permitir la libertad de culto y a partir del Edicto de Milán, en el 313, el cristianismo fue ganando adeptos sin parar. En esa estrategia de cristianización, el papa Julio I propuso en el año 350 que se celebrara el nacimiento de Jesús el 25 de diciembre. Así se decretó de manera oficial cuatro después por parte del papa Liberio. Y tras el Edicto de Tesalónica, en el 380, el emperador Teodosio decretó el cristianismo como religión oficial del Imperio.
Con la caída del Imperio romano en el siglo V los historiadores marcamos el inicio de la Edad Media. Fue a lo largo de estos mil años de historia cuando Europa pasó a ser conocida como la Cristiandad y las tradiciones de sus ritos y festividades fueron tomando forma.
En resumen: la Navidad fue una adaptación a una fiesta pagana para facilitar la difusión del cristianismo y existe de manera oficial desde el año 354 d. C.
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