Por Blog Hotmart
La estabilidad financiera es un sueño de muchas personas, ya sean emprendedoras o no. Y ante una economía tan imprevisible como la de hoy, es algo de la mayor importancia saber cómo administrar el dinero que tenemos en mano aquí y ahora.
Aunque ya sabemos también que no es nada fácil planificar los gastos y ahorrar lo suficiente para construir un patrimonio, principalmente para quien quiere comenzar un negocio propio.
VÍDEO | Hotmart Tips | ¿Cómo ahorrar dinero? 6 ideas para mejorar tu vida financiera
En este post, compartiremos 21 consejos sencillos sobre cómo administrar el dinero, dedicados a quienes desean tener una vida financiera más sana, incluso sin tener un presupuesto muy elevado.
Si adoptas por lo menos uno de los hábitos que siguen verás que, con el tiempo, tu dinero rendirá más.
Pero, adelantando ya alguna información, te diremos que a partir de ahora las hojas de cálculo y las calculadoras serán tus mejores amigas.
Entonces, vamos a ver estos 21 consejos sobre cómo administrar el dinero:
1. Apunta tus gastos fijos
Los gastos fijos son los que pagamos todos los meses, como alquiler, agua, luz, teléfono, Internet, etc. Es importante resaltar que debes incluir en la lista los impuestos…. ¡que no se te olvide!
Tener un registro de los gastos fijos es importante para saber cuánto de la renta familiar sobra todos los meses para invertir, ahorrar o incluso destinar al descanso y al ocio.
Asimismo, y si eres un emprendedor, también debes tener un control de los gastos fijos de tu negocio, como el alquiler y los costes de producción.
Hay varias maneras de realizar este control, pero para empezar te recomendamos mantener una hoja de cálculo en Google Drive o en Excel, lo que te permitirá organizar, actualizar y guardar tus datos con gran facilidad, además de automatizar cálculos gracias a sus sistemas de fórmulas.
Si eres un emprendedor digital, aprovecha para bajarte gratuitamente nuestra planilla preconfigurada para calcular las principales métricas de tu negocio digital:
2. Separa al menos el 10% de tus ingresos cada mes
Antes de pagar los gastos fijos, trata de reservar al menos el 10% de tu renta para invertirlo. Esta será una excelente manera para entender de forma simple cómo administrar el dinero, en caso que no tengas mucho tiempo para hacer algunos cálculos.
Si ganas un sueldo fijo mensual, esto significa que debes separarlo del mismo. Si trabajas como autónomo, ese porcentaje se separa de todas tus ganancias del mes.
El objetivo aquí no es sólo ahorrar dinero por un período de tiempo hasta poder gastarlo en algo superfluo, sino aplicar ese valor para que pueda rendir intereses y convertirse en un patrimonio importante en el futuro.
Al principio puede ser difícil “abandonar” ese 10%, pero si te enfocas en el resultado a largo plazo y logras adaptar tu estilo de vida sin hacer grandes sacrificios, en menos de un año ya comenzarás a ver los primeros resultados.
3. Mantén tus gastos personales separados de los de tu negocio
Esta sugerencia vale para quien ya tiene un emprendimiento o pretende comenzar uno. Muchos pequeños y medianos emprendedores todavía tienen dificultades para separar los gastos personales de los gastos del negocio, lo que puede llevarte no sólo a acumular pérdidas, sino incluso a la quiebra.
Esta práctica es mala porque no puedes saber si tu negocio está produciendo ganancias, simplemente porque estarás siempre sacando el dinero de la caja para fines privados.
La falta de capital también impedirá que puedas invertir en mejorar los procesos y en divulgación, lo que no hará sino ponerle un techo de cristal al crecimiento de tu negocio.
Y, por último, mezclar las cuentas personales con las del negocio puede dar una falsa impresión de “riqueza” y motivarte a gastar más de lo que realmente puedes en ese momento.
Entonces, te recomendaremos que tengas dos cuentas separadas si eres un emprendedor. La buena noticia es que puedes utilizar la cuenta de persona jurídica para contratar planes corporativos para tu empresa, tales como seguros médicos, tarjetas de alimentación, etc., que también te ayudarán a contener los gastos.
4. Trata en lo posible de no pedir financiaciones
Las financiaciones son un peligro para el pequeño y mediano negocio, ya que representan un compromiso a largo plazo y suelen cobrar intereses elevados.
Sabemos que no siempre es posible evitarlos, ya que son útiles para captar recursos en la fase inicial del emprendimiento. Pero siempre que necesites pedir una financiación busca reducir en lo posible el número de plazos, además de hacer un estudio comparativo de las condiciones estipuladas por varias instituciones financieras, para poder escoger la menor tasa de interés.
Recuerda que las financiaciones también deben ser incluidas en tu hoja de gastos fijos durante todo el tiempo de vigencia de su contrato.
5. Amortiza tus deudas lo antes posible
Si ya has obtenido un préstamo a tu nombre, piensa en abonar más cuotas simultáneamente para reducir la duración del contrato y, claro, los intereses.
Pero ojo, no estamos diciendo que debas estrangularte financieramente para pagar las deudas más rápido. Lo ideal es usar un dinero que esté “sobrando” para adelantar las cuotas. O sea, nada de tocar los gastos fijos o el flujo de efectivo de tu negocio.
Por ejemplo, puedes reservar para ello el dinero recibido por un trabajo puntual que hayas realizado.
6. Estudia sobre inversiones
Invertir es una forma de asegurarse de que no gastarás tu dinero en algo superfluo. Pero cuando usamos la palabra “inversión”, puede parecer que estamos hablando de algo que requiere mucho conocimiento previo.
¿También piensas así? ¡Pues es exactamente lo contrario!
Todo el mundo puede invertir, desde la gente con un perfil más conservador hasta la que tiene uno más audaz.
Por ello te recomendamos estudiar los diferentes tipos de inversión disponibles en tu país. Solo entonces podrás elegir el que mejor se adapte a tu perfil. Además, puedes hablar con personas que sepan de inversiones antes de tomar tu decisión.
Algunos tipos de inversión son:
Cuentas de ahorro
Las cuentas de ahorros son exitosas en todas partes porque son fáciles de abrir y muy seguras. Los ahorros, en la mayoría de los países, tienen un riesgo más bajo que el de cualquier otro tipo de inversión, pero también tienen el potencial de rendimiento más bajo.
Es por eso que se recomienda hacer depósitos en efectivo en una cuenta de ahorro a los inversores conservadores, con una menor tolerancia al riesgo.
Fondos de inversión
Los fondos de inversión o fondos mutuos reúnen dinero de diferentes inversores y luego lo invierten en toda una variedad de inversiones, como acciones, bonos, etc.
Este tipo de inversión es adecuada para aquellas personas que pueden permitirse invertir pensando a largo plazo.
Acciones
A diferencia de las opciones anteriores, el mercado de acciones es recomendable para aquellos inversores con un perfil más audaz.
El valor de las acciones puede oscilar enormemente durante el período en que el mercado está abierto, por eso es un modelo que acarrea riesgos.
La administración de acciones exige una comprensión más profunda de cómo las compañías están funcionando y es crucial también un monitoreo continuo de la bolsa de valores.
Esta forma de cómo administrar el dinero es bastante interesante, pero también riesgosa, así que antes de invertir, debes aprender mucho sobre el mercado bursátil.
7. Establece objetivos financieros
Antes de seguir adelante es importante conocer la diferencia entre metas y objetivos. Aunque estemos acostumbrados a usar estas dos palabras indistintamente, pueden tener ciertas diferencias de significado:
Los objetivos representan lo que queremos lograr a largo plazo, mientras que las metas, por otro lado, representan acciones concretas, cuantificables y con plazo predeterminado.
Por ejemplo, si tu objetivo es aumentar los ingresos por ventas de tu negocio, tus metas, a su vez, podrán ser duplicar el número de transacciones en los próximos seis meses, aumentar el ticket promedio de tus clientes en un 50%, etc.
Aprovecha esta oportunidad para leer nuestro post sobre cómo establecer metas para tu negocio.
VÍDEO | ¿Cómo definir metas y objetivos para tu negocio? | Hotmart Tips
8. Paga al contado siempre que puedas
Esto puede sonar a cliché, pero cualquier especialista en finanzas nos dirá que una de las formas más efectivas de cómo administrar el dinero, tiene que ver con comprar algo sólo cuando tengamos el dinero para hacerlo.
Es por esto que pagar en un solo pago (o usar una tarjeta de débito, por supuesto) es una excelente estrategia para ahorrar dinero, ya que evitas gastar un dinero que realmente no tienes.
Muchas tiendas en todo el mundo ofrecen ofertas especiales y descuentos para pagos en efectivo. Esto significa que puedes ahorrar dinero y pagar menos por un producto o servicio.
9. Evita usar tu tarjeta de crédito
Otra sugerencia importante para saber cómo administrar el dinero está estrechamente relacionada con el punto anterior.
¿Quiere decir que nunca deberías usar tu tarjeta de crédito? ¡Por supuesto que no! Las tarjetas de crédito representan una gran comodidad para el consumidor, además de ser el método de pago en línea más común.
Aunque nuestro consejo es que trates de evitar usarla cuando tengas efectivo para pagar algo. En muchas partes del mundo, cuando realizas pagos a crédito (o en cuotas), terminas pagando intereses, gastando así más de lo que pagarías si lo hicieras al contado.
10. Establece límites a los gastos variables
Todo lo que no es un gasto fijo es un gasto variable. O sea, un tipo de gasto que, en principio, se puede dejar para más tarde. Pero sabemos que, en la práctica, la gente no quiere dejar de privarse de pequeños placeres, como salir con amigos, hacer un viaje o comprar algo que no sea esencial.
Para estos casos te recomendamos establecer un límite para los mismos. Reserva una pequeña cantidad de dinero para tus actividades de ocio.
Sabemos que tu objetivo es ahorrar dinero, pero si terminas sacrificándote con demasiada dureza, también puedes terminar renunciando al ahorro por completo.
Por ejemplo, para gestionar los gastos variables de manera equilibrada te puede ayudar establecer recompensas pequeñas para cuando logres una meta, o hacer una lista con cinco elementos que consideres superfluos, intentando incluir al menos uno de ellos en tu presupuesto mensual.
11. Utiliza herramientas de gestión financiera
Si no tienes la costumbre de trabajar con hojas de cálculo y necesitas métodos más sencillos para controlar tus gastos, existe toda una variedad de programas y aplicaciones de gestión financiera para ayudarte.
Algunos de ellos ofrecen la opción de subir los comprobantes de pago efectuados con tarjeta, seguir el movimiento bancario e incluso insertar recordatorios para el pago de cuentas. Así, tienes un control de todo lo que entra y sale de tu cuenta. Por ejemplo, no te tomarán más de sorpresa los intereses abonados en concepto de retrasos en los pagos.
Uno de ellos es Wallet, un servicio orientado y pensado para aquellos que no tienen conocimientos financieros. Se trata de ir introduciendo los movimientos financieros a la vez que los vamos etiquetando de forma correcta para que estén dentro de las categorías disponibles. El resultado es un gráfico sencillo que nos indica cómo nos gastamos el dinero.
Otras opciones son Fintonic, para iPhones, y Mint, para Android. Ambas son aplicaciones gratuitas que te ayudan a controlar tus finanzas manteniendo un registro de todas tus transacciones en un solo lugar.
A la lista podríamos añadir Moneytrackin’, una aplicación que sigue las pautas de las anteriores para controlar las finanzas personales. Lo más interesante de este servicio es que además de una aplicación es una comunidad de ahorradores, de modo que puedes recibir consejos de otros usuarios para lograr el objetivo mayor de controlar de manera adecuada el dinero.
12. Busca fuentes alternativas de renta
Hoy en día, hay muchas actividades que puedes llevar a cabo en casa para ganar dinero. Un excelente ejemplo es el Marketing de Afiliados. Con él, promocionas los productos de otras personas a cambio de comisiones cada vez que se realiza una venta a través.
Si eres creativo y disfrutas creando contenido, puedes comenzar un blog y escribir sobre algo que te guste. También puedes convertirte en un productor digital y crear un curso online para compartir tus conocimientos con otras personas.
Quien posee un canal de YouTube o un perfil con muchos seguidores en Instagram puede convertirse en influencer digital y ganar dinero a través de asociaciones con marcas, ventas de productos y la exhibición de anuncios a través de Google AdSense.
Para hacer cualquiera de estas cosas, todo lo que necesitas es una computadora (y como mucho una cámara) con acceso a Internet. Y si no te has identificado con ninguna de las profesiones que sugerimos, también puedes encontrar en el siguiente link otras formas de complementar tus ingresos trabajando desde tu casa.
13. Define un presupuesto promedio
Para los profesionales autónomos es toda una lucha cuando se trata de planificar un presupuesto, ya que no tienen ingresos o beneficios fijos.
Nuestro consejo para evitar sorpresas desagradables es efectuar una media de los ingresos de los últimos meses e identificar los períodos en los que gana más y menos, y los efectos de la estacionalidad en tus ventas, como fechas y eventos conmemorativos, periodos de temporada alta y baja, etc.
Lo ideal aquí es que tus ingresos mínimos sean suficientes para pagar tus gastos fijos. Cuando estés en aquellos meses de alta facturación en los que ganas más que la media anual, invierte el excedente o ahórralo para poder encarar los meses en que la facturación es naturalmente baja.
14. Usa Internet para comparar precios
Si haces una rápida búsqueda de un producto en Internet verás que muchos sitios diferentes los venden, y a muchos precios diferentes.
Por eso, cada vez que estés a punto de realizar una compra, busca el mejor precio que se ajuste a tu presupuesto. Después de todo, cuando se trata de ahorrar dinero, las páginas comparadoras de precios son excelentes, porque cada centavo cuenta.
Un buen ejemplo de ellas es la mexicana Kelkoo.
Si estás buscando un producto digital, como un curso online o un ebook, también puede ser buena idea buscar en grupos de Facebook o suscribirte a listas de Productores, manteniéndote con ello al día sobre las ofertas.
Es importante recordar que, en el caso de los productos digitales, el precio no es lo único que debe tenerse en cuenta. El valor que proporcionan, los problemas que ayudan a resolver y su costo real… todo debe tenerse en cuenta.
15. Únete a los programas de recompensas de tarjetas de crédito
Los programas de recompensas también son excelentes para quien quiere ahorrar y saber cómo administrar el dinero de mejor forma. En estos programas, se nos recompensa por cada compra realizada, obteniéndose puntos que pueden canjearse por otros productos y servicios, como pasajes de avión, por ejemplo.
La mayoría de los emisores de tarjetas de crédito ofrece programas de recompensas, y suscribirse es generalmente gratuito.
También hay muchos programas de recompensas en efectivo disponibles, esto es, en los que puedes canjear puntos por dinero en efectivo en lugar de productos. Algunos ejemplos son Chase Ultimate Rewards y American Express Reward Dollars.
16. Únete a los programas de suscripción
¿Existe algún producto o servicio que consideres superfluo, pero que sin embargo consumes con frecuencia? Entonces, deberías considerar unirte a un programa de suscripción.
A través de ellos podrás ahorrar más que si compraras los artículos por separado, además de ofrecer la obvia ventaja de recibir los productos directamente en tu casa.
Vino, café, cerveza y productos de belleza son ejemplos de productos vendidos a través de programas de suscripción.
Y cuando se trata de productos digitales, los planes mensuales de suscripción suelen ser como áreas de miembros, entornos virtuales de aprendizaje en los que los alumnos pueden consumir los materiales puestos a disposición por el vendedor.
17. Compra productos de segunda mano
Con la tendencia cada vez mayor hacia el minimalismo y el consumo consciente, comprar artículos de segunda mano es una forma de ayudar a salvar el medio ambiente y además de aprender a cómo administrar tu dinero mediante el ahorro.
Hay muchas tiendas de segunda mano en cualquier lugar del mundo, por ejemplo, con ropas y zapatos de alta calidad que se venden a un precio mucho más bajo, con muebles, electrodomésticos, etc.
En línea se puede encontrar una variedad de productos en sitios web como Mercado Libre, Vibbo y Segundamano. En estas plataformas, los usuarios ponen los productos a la venta y los sitios actúan como intermediarios en el proceso de compra. Lo mismo sucede en e-Bay y Wallapop, aunque también vendan productos nuevos.
También puedes unirse a los grupos de Facebook y efectuar el trueque de productos y servicios con otras personas.
18. No ignores los pequeños gastos
Los servicios que cobran directamente a través de tu tarjeta de crédito, como Uber, Lyft o aplicaciones y sitios que entregan comida, pueden actuar como trampas para quien quiere ahorrar. Eso se debe a que uno gasta dinero sin darse cuenta y cuando llega la factura, llegan las sorpresas.
Por eso te aconsejamos que no pases por alto estos pequeños gastos. Por mucho que hagas viajes cortos en Uber, por ejemplo, pueden acumularse y convertirse en un problema a fin de mes.
En la medida de lo posible, usa el transporte público o camina. Dependiendo de la distancia, puede salirte mucho más barato.
Por supuesto, no estamos diciendo que nunca debas usar aplicaciones de publicación o entrega compartidas. Solo asegúrate de no exagerar, o úsalos cuando no haya una alternativa más económica.
19. Evita comer fuera
Comer fuera de casa puede ser muy costoso dependiendo de dónde trabajes o dónde se encuentre tu negocio. Por ello te recomendamos llevar tu propia comida al trabajo, por ejemplo.
Una vez más, no te estamos proponiendo que no comas fuera de casa cuando quieras, sino apenas que pruebes a intentar reducir los gastos de restaurantes cuando te sea posible.
Si trabajas desde casa, te será aún más fácil seguir esta propuesta. Además, podrás comer más sano por el hecho de controlar de cerca lo que comes y cómo lo preparas.
20. Elige pagos automáticos para tus cuentas
La automatización del pago de las facturas es una excelente manera de no abonar recargos por mora.
La acumulación de facturas nunca es una buena idea, ya que te hace perder el control de tus finanzas.
Para resolver este problema, tenemos dos sugerencias: gastar menos (que es básicamente la idea principal de este post) y, si te es posible, establecer las fechas de vencimiento de las facturas cerca de su día de pago.
21. Ahorra cada centavo extra
El 21º y último consejo es bastante obvio, pero hace toda la diferencia para que administres tu dinero un poco mejor y lo hagas crecer. En una palabra: ahorra cada centavo extra que ganes.
¿Sabes aquel dinero que no sabías que te estaba llegando? Como la participación de los beneficios de la empresa en que trabajas, cobros de trabajos independientes o, en el caso de los emprendedores, el lanzamiento de un producto con mejores resultados de los que se esperaba…
Bien, pues te aconsejamos que ahorres ese dinero extra y que lo inviertas, añadiéndolo al 10% que ya ahorres cada mes. Como este dinero extra es una sorpresa agradable, no lo perderás cuando llegue el momento de pagar las facturas.
Es importante recordar que cuanto más inviertes, más ganas, lo que a su vez significa más dinero para comprar algo importante o efectuar mejoras en tu negocio.
¿Hemos dejado alguna sugerencia importante de lado? ¿Te gustaría compartirnos lo que haces tú para hacer crecer tu dinero? Cuéntanoslo en los comentarios.
VÍDEO | ¿Cómo administrar el dinero? | Hotmart Tips
Sin embargo, las medidas de ahorro y control son solo una parte del juego de la administración del dinero, la otra es hacerse más eficiente generándolo.
Para ayudarte a esto último, puedes leer también nuestra publicación sobre cómo comenzar a vender online desde cero.
* Este texto fue publicado originalmente en enero de 2019 y se ha actualizado para proporcionar informaciones más precisas y completas.
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