Por Sonora Star
La amistad es uno de los mejores regalos en la vida. Pero al igual que cualquier relación, la amistad puede cambiar o transformarse por factores como eventos de la vida (mudarse a algún lugar, cambiar de trabajo o escuela), cambios en nuestras interacciones (influencia de la tecnología) o el simple y natural paso del tiempo.
Cualquier de estas condiciones puede aumentar tu conexión con cierto amigo o disminuir tu cercanía con otro. Pero incluso cuando la dinámica de la relación cambia, los elementos clave de cualquier amistad verdadera permanecen intactos.
En términos generales, las cualidades fundamentales de una buena amistad dependen de un factor en común: estar presente.
A continuación se comparten las cualidades fundamentales de una amistad sana y por qué son tan necesarios para mantener este vínculo intacto:
1. Reciprocidad
Cualquier tipo de amistad debe dar y recibir, pero con equilibrio. Por ejemplo, dar demasiado hará que crezca el resentimiento hacia la otra persona; recibir demasiado del otro hará que tu amistad se aleje de ti.
Los amigos deben dar su consentimiento a la relación debido a la responsabilidad que implica. Esto significa ponerse de acuerdo sobre cuánto dar y recibir. Una amistad funcionará mejor si se consideran el uno al otro al mismo nivel de amistad.
Ponerse en la misma página acerca de dónde cae cada uno en el esquema de amistad puede ayudarte a evitar decepcionar a un amigo o ser decepcionado.
2. Apoyo
Los momentos difíciles separan a nuestros amigos más cercanos de nuestros amigos ocasionales por una razón fundamental: el nivel de intimidad que posee un amigo contigo hace que te apoye no solo cuando es fácil, sino también cuando es doloroso o difícil.
Aunque esta dimensión de apoyo variará en todo el espectro de la amistad, la idea es que el nivel de apoyo, como la energía que viertes en una relación, en general, sea equitativo y correspondido.
Esto también está ligado a la idea de reciprocidad en una amistad. Significa que puedes considerar no solo tus necesidades, sino también las necesidades de tu amigo en todos los escenarios.
3. Límites
Establecer límites puede sonar como construir un muro entre tú y un amigo en lugar de permitir que fluya la intimidad. Pero en la práctica, pueden ayudar a delinear cómo navegarás tu relación de una manera que tenga en cuenta las necesidades, los deseos y las expectativas de las personas.
Establecer un límite con un amigo puede ser tan simple como tener claro qué días de la semana puedes o no puedes pasar el rato con él o ella, qué actividades te hacen sentir incómodo o qué necesitas de ellos para sentirte apoyado.
4. Afecto
Puede parecer obvio, pero en realidad tiene que agradarte más un amigo que un extraño para que la amistad funcione. No es necesario que los ames, pero sí debes tenerlos en una consideración positiva y actuar de una manera que demuestre tu afecto. Por el contrario, uno de los rasgos más comunes en las relaciones tóxicas es que una o ambas personas destruyen a la otra.
Una amistad saludable es aquella que te llena de energía y positividad. A menudo, podemos mantener una amistad negativa o agotadora simplemente porque hemos estado en ella durante mucho tiempo.
5. Facilidad
Una amistad puede florecer solo cuando ambas personas se sienten cómodas el uno con el otro.
Si sientes que necesita estar a la defensiva todo el tiempo o que camina ‘entre minas’, no obtendrás todos los beneficios sociales y de salud de la verdadera amistad.
En este sentido, una buena amistad también debe estar desprovista de cualquier dinámica de poder. Si una persona tiene más poder que la otra, la segunda persona nunca podrá ser feliz o tener la libertad de ser él/ella mismo/a.
6. Vulnerabilidad
Cuando compartimos información privada revelamos sentimientos personales y aceptamos apoyo, construimos intimidad en nuestras amistades. Si bien este elemento de amistad es mucho más potente con un amigo cercano, sentirse capaz de compartir algún grado de información personal con cualquier amigo es necesario para una conexión sana.
La posibilidad de ser vulnerable también es un indicador de que tienes una base de confianza, que es necesaria para cualquier relación, y una manera de fomentar aún más la confianza.
7. Previsibilidad
Si bien cualquier amistad puede fluir con el tiempo, es necesaria una sensación constante de saber hacia dónde van para mantenerla intacta. En otras palabras, debe haber expectativas claras sobre el nivel de comunicación y conexión que tendrás con un amigo, ya sea que eso signifique enviar mensajes de texto todos los días, llamar cada semana o reunirse para ponerse al día una vez al mes.
Cuando eso se fusiona en un ritmo, generas confianza: cada persona puede estar segura de cuándo se reunirán y puede esperar una respuesta a cambio.
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