Por Sonora Star
¿Alguna vez has pensado en qué es lo que causa que no logres tus propósitos de Año Nuevo?
Muchos podrían afirmar que perdieron la motivación, que sus prioridades cambiaron o que fue demasiado difícil. Sin embargo, podría haber otros factores en juego.
De acuerdo con la coach de vida y autora Desiree’ Stapleton, existen circunstancias y enfoques vitales que hacen que el éxito y la productividad sean posibles para todos. Estos son tres de ellos:
1. Tu círculo interno
Existe un dicho que reza “dime con quién andas y te diré quién eres”. También hay otro que indica “eres el promedio de las cinco personas más cercanas a ti”. Existe una razón por la cual estas frases son tan comunes: nuestro entorno, incluidos aquellos con los que nos asociamos, son un factor importante en nuestro éxito.
Intenta hacer un inventario de las personas que te rodean: ¿están respondiendo a tus sueños con indiferencia o están brindándote apoyo? Lo anterior no tiene que ser un juicio dramático y excluyente. a veces, no es que las personas estén tratando de evitar que tengas éxito, simplemente podrían no tener la mente en nuestros intereses. Cualquiera que sea el caso, es importante tomar nota de cuál es su enfoque.
La dura verdad es que la proximidad a personas que no tienen el mismo nivel de ambición es un obstáculo para la productividad. Permanecer igual es fácil, y relajarse y tomárselo con calma… es fácil, pero hacer cambios y apegarse a ellos es difícil. Es mucho más fácil mantener el rumbo cuando estás rodeado de personas que han adoptado un estilo de vida afín. Y si estás formando un grupo de este tipo de personas desde cero, buscar mentores y grupos de apoyo es de gran ayuda.
Nadie quiere minimizar o excluir a las personas que le importan solo porque no tienen la misma visión, y reducir o ajustar un círculo interno no es fácil, pero construir el éxito significa incluir en nuestras vidas y carreras personas que son excelentes para nuestro futuro, no sólo nuestro pasado.
2. Hábitos
Los hábitos podrían definirse como “cosas que hacemos a diario que están automatizadas”, y más específicamente, son tendencias o prácticas que a menudo son difíciles de abandonar. Todos tenemos algunos que nos funcionan bien y otros que podrían estar obstaculizando nuestra productividad.
Por lo tanto, considera adoptar hábitos que podrías implementar para alcanzar tus objetivos, así como dejar de hacer otros para vivir una vida más dinámica y próspera. Haz un inventario y selecciona cuáles de ellos te ayudan a avanzar y cuáles te están retrasando en tu camino hacia el éxito.
3. Mentalidad
Nuestra visión y enfoque de la vida se construye a partir de experiencias y creencias. Algunas creencias las elegimos, otras parecen arraigadas, pero todas pueden adaptarse y aprovecharse para un bien mayor.
Tómate un segundo y piensa en todas las cosas negativas que te dices a ti mismo cuando es hora de ser productivo, o incluso simplemente optimista, y entrénate para cambiarlas.
Un gran camino para generar una nueva mentalidad es consumir contenido que te inspire la acción. Esto podría ser ver videos motivacionales e inspiradores, escuchar audiolibros o podcasts de productividad que te hagan sentir bien, o cualquier cosa que te invite a ser más productivo.