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Superar una entrevista de trabajo no depende al 100% de nosotros, pero los candidatos solemos cometer una serie de errores casi imperceptibles para nosotros mismos que, sin embargo, podrían acercarnos mucho más al puesto de trabajo deseado. Esto es lo que afirma Gary D. Burnison, CEO de la empresa Korn Ferry y autor del libro Lose the Resume, Land the Job (que podríamos traducir como "Pierde el currículum, consigue el trabajo"). ¿Cuáles son, a su juicio, los principales fallos que cometemos en una entrevista de trabajo. Los desgranamos a continuación.
Imagen: Pexels
No saber quién es la persona que te entrevista
No tienes que conocer personalmente al reclutador, pero sí saber cómo se llama y cuál es su puesto dentro de la empresa. Es lo básico: si vamos a mantener una conversación de un cuarto de hora en adelante, qué menos que saber quién es la persona que nos entrevista. Para conocer esta información basta con preguntar al responsable de Recursos Humanos que previamente ha contactado con nosotros. Si la persona que te entrevista es el responsable de RRHH, te será mucho más fácil conocer esta información.
OJO: una cosa es saber cómo se llama el recruiter y cuál es su puesto de trabajo, y otra bien distinta cotillear sus redes sociales y hacer comentarios sobre su vida personal para "romper el hielo". Esta es una indiscreción enorme que causará, precisamente, el efecto contrario. ¡No sobrepasemos los límites!
No estar al corriente de lo que se está haciendo ahora mismo en la empresa
Antes de enfrentarte a una entrevista de trabajo debes hacer un estudio previo de la empresa en la que quieres trabajar. Pero esta investigación no puede quedarse en algo meramente superficial (la historia de la compañía, los clientes que tienen o han tenido) sino ir más allá y abarcar los desafíos a los que se enfrenta la empresa a día de hoy y los objetivos a corto/medio plazo que tienen. Sabemos que no siempre es fácil encontrar este tipo de información (algunas empresas son muy reservadas en cuanto a sus resultados y planes futuros) pero tienes que hacer un esfuerzo en encontrar algo que te diferencie.
No hacer ninguna pregunta al reclutador
¿El reclutador te ha preguntado si tienes alguna duda o pregunta? No respondas con un "No" o "No lo sé", ya que estas respuestas pueden dar la impresión de que tienes poco interés en el puesto o de que eres poco espabilado/a. En su lugar, puedes preguntar por el clima laboral, las posibilidades de promoción interna, las prioridades de la empresa, etc.
No apagar tu teléfono móvil
Puede parecer algo básico, ¿verdad?. Pues te sorprenderá saber la gran cantidad de candidatos que olvidan apagar o silenciar su teléfono móvil y reciben un WhatsApp o una llamada en plena entrevista de trabajo. Si bien es cierto que todo depende de cómo sea el recruiter (algunos son más flexibles con este tema; otros considerarán esta interrupción como un signo de descuido y poco respeto por tu parte) podemos y debemos evitar este tipo de interrupciones. Ni qué decir tiene que si te suena el teléfono en mitad de la entrevista de trabajo no podrás responder la llamada.
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